El Pontifex Maximus era la cabeza religiosa del estado Romano y el puesto más alto del Colegio de Pontífices. Si bien de caracter religioso, su importancia política fue indiscutible.
Los cónsules romanos fueron los gobernantes de la República romana, elegidos de a pares, estos tenían la tarea de dirigir a Roma y reportarse ante el Senado
El edil, una de las magistraturas de menor rango en la escala política romana pero a su vez una de las más importantes para el funcionamiento del sistema social romano.