La Odisea y la obra homérica
La Odisea es un poema épico compuesto a finales del siglo VIII a.C. y atribuido al poeta griego Homero. El mismo es una continuación a los eventos de la Guerra de Troya relatados en La Ilíada, y se trata de una epopeya épica en la cual Odiseo y sus hombres deben retornar a sus hogares y enfrentarse a infinidad de peligros y amenazas en el trayecto.
Esta obra fue compuesta originalmente en el denominado dialecto homérico, es decir, el griego que utilizaba Homero para componer sus poemas y epopeyas. El dialecto homérico consistía principalmente en una combinación entre el dialecto jónico con características y elementos del dialecto eolio. La Odisea se compone de un total de 24 cantos, y fue compuesta con la intención de ser recitada de manera oral por los aedos (artistas que se especializaban en cantar las epopeyas de manera dramática y colorida) durante las festividades griegas.
Además de ser un obra clave de la literatura occidental, La Odisea a su vez ha servido de inspiración a infinidad de obras artísticas y literarias a lo largo de los siglos. Desde obras literarias como el Ulises de James Joyce y piezas musicales clásicas hasta obras de teatro y varias películas de la época dorada de Hollywood. La Odisea, con sus monstruos y seres mitológicos, fue representada también por Ray Harryhausen, el pionero de los efectos especiales en el cine.
La historia de La Odisea
La Odisea comienza tras los fatídicos eventos relatados en La Iliada, poema en el cual Homero relata la guerra entre los aqueos (griegos) y los troyanos. Conflicto que desemboca en la destrucción de la ciudad de Troya (Ilión) y la muerte de muchos héroes, como es el caso de Héctor y Aquiles. El héroe Odiseo, denominado Ulises por los romanos, era uno de los caudillos y héroes del bando griegos que sobrevivieron a la contienda.
Tras pasar un década asediando a la ciudad de Troya bajo las órdenes de Agamenón, La Odisea comienza tras la finalización de dicha guerra, relatando tanto el viaje de retorno de Odiseo y sus hombres a Ítaca, hogar y dominio de Odiseo, y los intentos de su hijo Telémaco por evitar que un grupo de hombres inescrupulosos tomen el trono que pertenecía a su padre. El viaje de retorno se transformaría en una verdadera odisea, que llevaría a Odiseo y sus hombres a deambular por el mar Mediterráneo durante una década debiendo enfrentarse a todo tipo de peligros tanto terrenales como míticos y divinos.
El concepto principal que maneja la odisea es el de retorno y el de la adversidad. El viaje, que solo debía durar unas semanas, termina convirtiéndose en una aventura de varios años debido al designio de los dioses. Si bien Odiseo era un excelso guerrero y sos hombres valientes combatientes, este héroe logra resolver la mayoría de los problemas a los que se debe enfrentar utilizando su astucia y sagacidad mental, algo que los griegos denominaban como mētis. Muchos de estos problemas no los resuelve con la espada, sino que lo hace con intrincados discursos, tretas y trampas a sus enemigos.
Si bien el héroe homérico debió enfrentarse a contratiempos divinos y míticos, no todos los dioses estaban en su contra, y a lo largo de su aventura recibiría la ayuda de varios de estos dioses y seres divinos. Principalmente de la sabia diosa Atenea, diosa quien tenía a Odiseo entre uno de sus morales predilectos.
Si bien la parte popularmente más reconocida de La Odisea es la aventura de Odiseo por el el mar Mediterráneo, otro de los aspectos más importantes de la misma es la lucha por el poder en Ítaca, la cual se da cuando varios caudillos dan por muerto a Odiseo y comienzan a pretender a Penélope, esposa del héroe y reina de Ítaca. Siendo Telémaco, hijo de Odiseo y Penélope, quien se lanza a la búsqueda de su padre.
Las partes de La Odisea
La Telemaquia
La obra puede dividirse en varias secciones. La primera es la denominada Telemaquia (cantos I al IV), parte en la cual se relata el sufrimiento de Telémaco y Penélope. Sufrimiento causado no solo por la incertidumbre del destino de Odiseo, sino además por el oportunismo de los pretendientes de Penélope, hombres ambiciosos y quienes pretendían dar a Odiseo por muerto con el fin de desposar a la reina y así convertirse en los reyes de Ítaca.
Telémaco se lanza a la mar en busca de su padre, llegando así a Esparta. En Esparta es recibido por Menelao y Helena, quienes informan al preocupado hijo de la conversación que Menelao tuvo con Proteo, quien le informó a este que Odiseo estaba retenido por Calipso. La Telemaquia termina relatando como los pretendientes se encontraban preparando una emboscada contra Telémaco.
El regreso de Odiseo
La segunda parte de la obra se denomina como el regreso de Odiseo (cantos V al XII), en la cual se relata la aparentemente interminable aventura de Odiseo por el Mediterráneo a lo largo de los años. Esta parte de la obra relata los eventos y vivencias de Odiseo desde que sale de Troya, tras darle los ritos funerarios a su camarada y amigo Aquiles, hasta retornar a su isla de Ítaca. Es precisamente durante esta parte en la cual Odiseo ganara el favor de varios dioses y el rencor y la ira de otros, debiendo además de enfrentarse a todo tipo de monstruos, abominaciones y seres mitológicos.
La Venganza de Odiseo
La tercera y última parte (cantos del XIII al XXIV) relata el retorno a Ítaca y la venganza de Odiseo sobre los pretendientes. En la misma vemos el emotivo reencuentro de Odiseo con su fiel perro, Argos, quien es el único que en un primer lugar logra reconocer al héroe para prontamente morir de vejez a los pies de su amo, y la venganza final de Odiseo y Telémaco sobre los soberbios y ambiciosos pretendientes.
La versión escrita de La Odisea
Como mencionamos anteriormente La Odisea fue un poema pasado de generación en generación a través de la rica tradición oral griega. No obstante, a lo largo de la historia han existido varias personas que han intentado plasmar el poema de manera escrita. Existiendo dos versiones: una en verso que intenta respetar la estructura en cánticos del poema original, y otra en prosa que relata los eventos de la obra a manera de cuento.
Si bien existen textos clásicos de la obra homérica, como los escritos por Aristarco de Samotracia en el siglo II a. C. utilizando la métrica de escritura denominada hexámetro dactílico, las versiones modernas de La Odisea están basado en los escritos del poema realizados durante el medioevo. La versión en español más antigua de La Odisea es la traducida por Gonzalo Pérez a mediados del siglo XVI.
Nota: esta es generalmente la versión más popular en nuestros días ya que se asemeja mucho más al tipo de literatura al cual estamos acostumbrados.
La Odisea, versión en prosa
La siguiente es una traducción de La Odisea por Luis Segalá y Estalella realizada en 1908. La misma corresponde a una versión en prosa de la obra clásica de Homero, es decir, La Odisea estructurada como un cuento. Luis Segalá y Estalella fue un lingüista español, autor y traductor cuya monumental obra de traducción de los clásicos homéricos ha sido invaluable para la literatura española. Al ser no solo un traductor, sino que además fue un excelso lingüista, pudo traducir las obras de manera fiel su significado e intenciones originales, de manera rica y con una prosa exquisita.
Debemos por último aclarar que Luis Segalá y Estalella en su traducción utiliza los nombres romanos de las deidades olímpicas. Por lo tanto, recomendamos utilizar nuestro artículo sobre Equivalencias entre los dioses griegos y los romanos como guía.
El libro completo
La obra se divide en veinticuatro cantos (o libros):