La lorica segmentata
Una de las más características armaduras romanas, e irónicamente a la vez una de las menos comprendidas debido a la falta de piezas arqueológicas completas, es la lorica segmentata. Esta armadura compuesta por placas metálicas segmentadas fue utilizada por los legionarios romanos desde finales del siglo I a. C. hasta mediados del siglo III d. C., y fue uno de los tantos símbolos de la prosperidad del Principado o imperio romano temprano. Con el deterioro del Imperio, y sobre todo tras la Crisis del tercer siglo, esta avanzada armadura fue siendo gradual y muy lentamente abandonada debido a su costosa y compleja producción. De diseño modular y segmentado, fue tan revolucionaria para su época que podemos ver armaduras similares a la lorica segmentata utilizadas incluso mil años tras de la caída del Imperio romano, como por ejemplo la armadura renacentista Anima, del siglo XVI.
Orígenes de la lorica segmentata
Como mencionamos en la introducción, en el presente contamos con muy poca información sobre esta armadura. Tanto desde bibliografía proveniente de fuentes primarias hasta especímenes arqueológicos intactos. Nuestras mayores fuentes de referencia son las esculturas y grabados del Imperio romano, principalmente los hallados en la Columna de Marco Aurelio y la Columna de Trajano, los cuales nos permiten observar legiones de combatientes romanos vistiendo esta llamativa pieza de equipo. Tan limitado es nuestro conocimiento sobre la misma que incluso desconocemos como los romanos en sí mismos la llamaban. La designación de lorica segmentata se comenzó a utilizar en el siglo XVI por autores renacentistas, y significa «coraza segmentada», haciendo obvia referencia a sus características estructurales. Sin embargo, gracias a un meticuloso trabajo arqueológico y un profundo estudio histórico, en las últimas ocho décadas hemos logrado entender tanto la construcción y estructura de esta armadura, así como trazar sus distintas variantes a lo largo de los siglos.
Adopción
La lorica segmentata remplazó a la lorica hamata, una armadura del tipo cota de malla utilizada por los legionarios romanos con anterioridad, y se introdujo prácticamente en simultáneo con el sctum augusta, el pesado escudo de tipo torre tan característico de las legiones romanas durante los tiempos imperiales. Al combinar dichos escudos con una armadura tan avanzada como la lorica segmentata los romanos lograron conseguir una supremacía defensiva sobre todos sus adversarios.
No obstante, la fecha exacta de su introducción es desconocida. Los historiadores modernos estiman que uno de los eventos históricos más probables que pueden haber llevado a su adopción fue la devastadora derrota sufrida por Marco Licinio Craso en la Batalla de Carras en 53 a. C. Así mismo, sabemos con certeza que ya para el año 9 a. C. la lorica segmentata era utilizada por los romanos gracias a los restos arqueológicos de la Batalla del bosque de Teutoburgo.
Utilización
Es imposible saber a ciencia cierta el nivel de utilización general que las legiones le daban a esta armadura. Si bien sabemos que el uso de la lorica hamata, es decir la cota de malla romana, era prácticamente universal tras las reformas de Mario, cuando hablamos de la lorica segmentata existen en el presente varias dudas sobre su uso en el común de las tropas. Así mismo, existe evidencia de que su uso no era común entre los oficiales. Por ejemplo, los centuriones del Imperio utilizaban una lorica squamata (como evidencian las columnas de la época Imperial), mientras que los legados, tribunos y oficiales de alto rango continuaron utilizando la lorica musculata.
Dicho lo anterior, en varias obras escultóricas del Imperio romano, como por ejemplo la Columna de Marco Aurelio o la Columna de Trajano, podemos observar a prácticamente la mayoría de los legionarios utilizando este tipo de armadura, incluso los legionarios encargados con tareas menores como el cuidado de los carros de provisiones. Así mismo, también vemos a legionarios encargados de tareas que iban más allá del combate cuerpo a cuerpo, como por ejemplo los artilleros, vistiendo la lorica segmentata. La imagen a continuación muestra a dos artilleros operando un escorpión:
La discusión, no obstante, radica en si podemos fiarnos por completo en estas rendiciones artísticas de escenas bélicas reflejadas en las esculturas, y cuánto las mismas difieren o no de lo que haya sido la realidad del equipamiento de los legionarios imperiales. Si bien ciertamente las mismas son contemporáneas al Imperio romano y sin duda alguna califican como fuentes primarias, también a su vez son piezas artísticas, y en el arte siempre se encuentran presentes ciertas libertades artísticas. Debido a esto, la visión de los historiadores es crítica al respecto, y se ha optado por una visión general más conservadora que la reflejada en las esculturas en la cual se estima que la lorica segmentata era utilizada por las cohortes de mayor importancia, pero no así por las tropas auxiliares y las tropas que realizaban tareas de menor importancia o las tropas que eran enviadas a zonas pacificadas.
Variantes de la lorica segmentata
Gracias a los limitados, pero a su vez provechosos, hallazgos arqueológicos realizados durante los dos últimos siglos reconocemos cuatro tipos de lorica segmentata. Estos tipos o variantes fueron nombrados a partir del lugar geográfico donde se descubrió el primer espécimen de cada variante, algo común en la arqueología, como por ejemplo también es el caso de la espada romana gladius. Espadas cuyas variantes fueron nombradas a partir del lugar geográfico donde fueron halladas.
Dichas variantes no son en realidad cambios estructurales muy significativos. Sino que constan, principalmente, en cambios internos de la armadura y diferentes puntos de ajuste de sus partes.
Los relieves romanos muestran una utilización prácticamente universal de la lorica segmentata entre los legionarios.
Variante Kalkriese (20 a. C. a 50 d. C.)
Se cree que esta fue una de las primeras variantes en ser utilizadas por los romanos, y se calcula que su fabricación y utilización por las legiones tuvo lugar desde el año 20 a. C. y el año 50 d. C. aproximadamente, un período relativamente breve. El hallazgo de esta variante de lorica segmentata fue realizó donde se encontraba emplazado el campamento legionarios de Carnuntum en Kalkriese (Alemania).
Es muy posible que muchos legionarios del general Publio Quintilio Varo la hayan vestido cuando fueron emboscados por las fuerzas de Arminio en la fatídica batalla del bosque de Teutoburgo. Batalla en la cual entre 20 mil y 30 mil legionarios perecieron tras ser tomados completamente por sorpresa en la que fue una de las emboscadas más famosas de la Historia.
Variante Corbridge (40 d. C. a 120 d. C.)
En 1964 un hallazgo arqueológico de monumental importancia tuvo lugar en la región del noreste de Inglaterra llamada Corbridge. Dentro de una caja de madera 12 secciones -6 hombros y 6 torsos- de diferentes armaduras segmentadas fueron localizadas en un relativo buen estado de conservación. Este hallazgo fue sin duda alguna tan significativo que permitió a Russell Robinson armar, gracias al trabajo de reconstrucción de los fragmentos llevado a cabo por el arqueólogo Charles Daniels, la primera réplica totalmente funcional de una lorica segmentata.
Anteriormente a dicho hallazgo sólo se entendía vagamente el exterior de estas armaduras a través de las esculturas, pero realmente no se entendía a ciencia cierta mucho de su armado y ensamblado. Hasta el día de hoy la lorica segmentata del tipo Corbrige es la variante de la que más detalles arqueológicos tenemos. Se calcula que su utilización rondó desde el año 40 d. C. hasta el año 120 d. C. aproximadamente.
Variante Newstead (120 d. C. a 250 d. C.)
Esta variante fue hallada por vez primera en Newstead, y posteriormente gracias a nuevos hallazgos realizados en Carlisle se pudo establecer que la diferencia más importante, que fue notada un tiempo después de su descubrimiento, entre esta variante y sus predecesoras son las bisagras superiores de mayor tamaño (es decir las bisagras que unen los segmentos de los hombros). Esto, en teoría, le otorgaba al legionario una movilidad más amplia y a su vez reforzaba el ensamblaje principal de la pieza. Junto a estos cambios también se pudo establecer que el sistema de ajuste frontal y trasero entre las secciones superiores e inferiores dejó de ser por hebillas y se pasó a utilizar ganchos. Lo que nos dice que este tipo de armadura podía vestirse y ajustarse más rápidamente que las variantes anteriores.
Se calcula su utilización entre los años 120 d. C. a 250 d. C. aproximadamente. Por ende, fue la variante de este tipo de armadura más longeva y de mayor uso en las legiones romanas.
Variante Alba Iulia
De las esculturas presentes los asentamientos romanos de Alba Iulia, actual Romania, se deduce un cuarto tipo de lorica segmentata. Poco se sabe de esta variante, pero las significantes variaciones presentes en la obra llevan a creer que esta fue otra variante más.
No obstante, es importante notar que esta no es considerada como una variante real por varios historiadores, ya que no existe evidencia arqueológica tangible de la misma y las variaciones vistas en las esculturas pueden ser atribuidas simplemente a una libertad artística tomada por los escultores.
Modo de uso y transporte
La ventaja de la lorica segmentata era su fácil desmonte, algo que han comprobado los recreacionistas históricos modernos. Desajustando los abrojos internos era fácil apilar en cuatro secciones y empacarla para su posterior transporte. De hecho, se cree que estas eran desensambladas durante la marcha de las legiones para así facilitar su traslado, algo que se confirmó en el hallazgo realizado en Corbridge anteriormente mencionado.
La armadura segmentada generalmente se vestía sobre una túnica militar y se utilizaba junto a un cingulum militare o balteus. El cingulum militare era un cinturón, que además de ajustar la túnica y sostener la vaina de la gladius ofrecía protección a la zona pélvica del legionario gracias a unas cintas colgantes adornadas con anillos de hierro o bronce.
Estructura y características técnicas
Su estructura principal consta de dos partes y cuatro secciones:
- Una parte superior compuesta de dos secciones que cubrían los hombros.
- Una parte inferior, también compuesta por dos secciones, que cubría el torso.
Estas secciones, a su vez, estaban armadas, o compuestas, por bandas de hierro dobladas de tal manera que ofrecían una protección muy superior a cualquier cota de mallas debido a la resistencia ejercida por el arqueamiento de las mismas. Las bandas metálicas que conformaban las diferentes secciones estaban sujetadas entre sí mismas por un sistema de hebillas y tiras de cuero, algo que la convertía en una pieza extremadamente modular.
Las bandas de las secciones que protegían los hombros eran situadas en posición vertical mientras que las del torso eran ubicadas horizontalmente. El cerramiento de la armadura, con respecto al cuerpo del legionario, se daba en un sistema de pliegues ubicados verticalmente tanto en la parte delantera como en la trasera de la armadura. Los toques finales del ajuste, que permitían que la misma se aferre fuertemente al cuerpo del legionario, se realizaban con una serie de broches, ganchos y hebillas de latón que variaban dependiendo de la variante de lorica segmentata.
Más allá de que visualmente puedan resultar aparatosas, las reconstrucciones de los recreacionistas históricos -personas que se dedican fielmente a reconstruir equipos y representar eventos históricos con un gran nivel de detalle- demuestran que en realidad la era una armadura mucho más flexible y cómoda de lo que aparenta visualmente.