Equivalencias entre los dioses griegos y los dioses romanos

Equivalencias entre los dioses

La civilización romana se encontraba abierta a las influencias externas. Lo que no quiere decir que fuera influenciable, todo lo contrario, era una civilización que adaptaba y adoptaba ideas, conceptos y costumbres foráneas a las suyas a través de un proceso de sincretismo cultural; haciéndolas así, con el pasar del tiempo, propiamente romanas.

Es así que los romanos adoptaron dioses y creencias de varios de los panteones de los territorios que conquistaban. No obstante, fueron los dioses griegos, así como toda la cultura griega en general, los que más influenciaron a Roma. De la cultura griega, dado el parentesco cultural y geográfico, así como su larga historia en común, adaptaron conceptos no solo arquitectónicos y filosóficos, sino que se dio un sincretismo casi total de su mitología y religión.

A continuación veremos estos ejemplos, en la gran mayoría de los casos podrás encontrar enlaces que te llevarán a los artículos principales sobre estas figuras mitológicas. En este artículo nos limitamos a mencionar los nombres de cada deidad griega y su contraparte romana, para obtener descripciones detalladas y un contexto histórico sobre las diferencias entre los dioses griegos y los dioses romanos sigue este enlace.

Equivalencias entre los dioses griegos y los dioses romanos

Muchas figuras en la mitología griega fueron transferidas a la mitología romana sin cambiar sus nombres. En las siguientes listas mencionaremos las figuras cuyos nombres fueron alterados al ser adoptados por los romanos como propios.

Dioses olímpicos

Los olímpicos eran los dioses griegos y las diosas griegas que gobernaban desde las alturas del Monte Olímpico. Estas deidades pertenecían a la familia de Zeus, el rey de los dioses, y sus acciones y deseos influían directamente sobre los fenómenos naturales y la humanidad.

Nota: Si bien Hades era parte de la familia de Zeus, este no era un dios olímpico, ya que su dominio era el inframundo, lejos de los cielos. A su vez, si bien los dioses olímpicos son doce dioses, los autores griegos a veces reemplazaban a Hestia por Dionisio entre sí y viceversa, por lo que en la lista aparecen trece deidades.

Otros dioses y semidioses

Además de los doce olímpicos, los griegos y los romanos tenían otros dioses que cumplían tareas específicas y generalmente asistían a los olímpicos.

Los titanes

Los titanes eran las deidades que precedieron a los dioses olímpicos y fueron destronados por estos en un conflicto denominado como la Titanomaquia. Debemos tener en cuenta que no todos los titanes fueron enemigos de los olímpicos, algunos se mantuvieron neutrales y continuaron cumpliendo con sus roles incluso tras el conflicto.

Nota: Gaia y Cronos, además de ser titanes eran dioses primordiales.

Dioses primordiales

Los dioses primordiales fueron los dioses de la creación, es decir, los dioses que aparecieron con la existencia del universo o al poco tiempo después de dicho evento. Si bien los romanos mantuvieron muchos de los nombres griegos, algunos de los dioses primordiales vieron sus nombres alterados.

Nota: Eros era uno de los dioses primordiales. No obstante, algunos autores griegos prefirieron reinterpretarlo como el hijo de Afrodita y Ares.

Vientos

Héroes

La razón por la cual existen pocas equivalencias entre héroes griegos y héroes romanos se debe a que los romanos no daban a los héroes mortales la misma importancia que los griegos, quienes dedicaron infinidad de poemas a las aventuras de héroes y semidioses a lo largo y ancho de la Grecia mítica. No obstante, hubo dos héroes mitológicos que sí llegaron a influenciar a los romanos en gran medida: Ulises (Odiseo) y Hércules (Heracles). Cuyos mitos e historias sirvieron para sentar las bases de Eneas, un héroe propiamente romano (si bien el origen de Eneas es griego, y se remonta a los himnos homéricos, fue la obra de Virgilio la cual le dio su desarrollo final)

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El sincretismo

La razón por la cual existen tantas equivalencias entre los dioses griegos y los dioses romanos se debe al fenómeno sociocultural denominado como sincretismo. El sincretismo, en los estudios de la religión y la antropología cultural, es el fenómeno cultural y social por el cual dos doctrinas o escuelas de pensamiento distintas, una doméstica y otra foránea, son conciliadas y adaptadas por una de las dos culturas.

En la mitología este sincretismo se da a causa de los intercambios culturales de los pueblos. Generalmente una cultura dominante impone sus creencias sobre la dominada, pero en el caso de Grecia y Roma se dio un fenómeno con muy pocos paralelos históricos: durante gran parte de la Historia Roma fue el poder político, económico y militar dominante mientras que Grecia fue la cultura dominante, razón por la cual los romanos, a pesar de haber conquistado militarmente a Grecia, veían a los griegos como una cultura superior.

Debido a lo anterior los patricios romanos solían contratar a un tutor griego para educar a sus hijos, ya que se creía que toda persona culta debía ser influenciada y moldeada por la literatura y la filosofía griega. Generalmente un patricio que no había recibido su educación por parte de un tutor griego era visto como una persona tosca y de poca cultura.

En contadas oportunidades un patricio en Roma no era educado por un griego. Por ejemplo, Julio César fue educado por un maestro celta durante su juventud, Marco Antonio Grifón. No obstante, durante su edad adulta temprana viajó a la ciudad griega de Rodas para ampliar sus estudios en la filosofía y el pensamiento de Grecia y convertirse en un orador digno de las más altas esferas políticas romanas.

Más allá de Grecia

Los romanos adoraron a dioses y creencias no solo de los griegos, sino que también tomaron algunos conceptos y mitos de los antiguos egipcios debido al contacto prolongado que tuvieron con esta cultura y su antigüedad. A su vez, también fueron influenciados por mitos y costumbres mesopotámicas, persas e incluso celtas, de quienes adoptaron incluso algunos de sus tipos de vestimenta.

Dado todo lo anterior, si podemos definir algo de los romanos es que estos tenían una mente abierta con relación a sus creencias religiosas y culturales, y estaban dispuestos a adoptar los conceptos de otras culturas que veían como válidos o interesantes. Roma, después de todo, llegó a ser la capital del mundo.