A lo largo de su historia los romanos tuvieron semanas de ocho días basadas en la semana etrusca y semanas de siete días. Constantino impondría la semana de siete días.
Si bien reconocemos a los romanos por sus togas, estos contaban con una amplia variedad de prendas de vestir, las cuales adornaban y vestían con orgullo,
Si bien la utilización de sombreros, gorros y capuchas no era común en la cultura romana, varios tipos de los mismos existieron tanto en el Imperio como en la República.